Comer en Alemania es una gran parte de la diversión de viajar allí. Los ingredientes son maravillosos (especialmente si comes con la temporada), las tradiciones son preciadas, la "cocina alemana moderna" está dando a los platos viejos sabrosos y entretenidos nuevos giros, y los pequeños y creativos lugares de comida están prosperando en cada ciudad. Y aquí hay aún más buenas noticias: comer bien en Alemania es un valor increíble, más barato que en Francia, Gran Bretaña, Italia o Escandinavia.
¡Hay tantos lugares para comer en todo el país! En cualquier ciudad o pueblo alemán, puede encontrar fácilmente restaurantes de gama media y de lujo que ofrecen comida tradicional, así como variedades modernas de cocina internacional. Los cafés más pequeños y más baratos también se ven fácilmente donde quiera que vaya.
A los alemanes les encanta su pan, así que encontrarás muchas panaderías (Bäckerei) y pastelerías en las calles e incluso en casi todas las estaciones de S-Bahn.
La cultura de la comida callejera se desarrolla especialmente en las grandes ciudades alemanas. Entonces, si pasas por un quiosco de comida callejera, ¡toma un Döner! Las opciones vegetarianas generalmente también están disponibles.
Los jardines de cerveza (Biergarten) son otra especialidad alemana y un lugar muy querido para relajarse. Es un área al aire libre en la que se sirven cerveza y comida local, generalmente en mesas compartidas. El entretenimiento común incluye música, canciones y juegos, disfrutados en un ambiente de Gemütlichkeit (comodidad).
No descarte la oportunidad de derrochar en restaurantes elegantes en Alemania. Con los programas de cocina tan populares en la televisión alemana, los alemanes ahora se toman la comida tan en serio como sus vecinos en Francia y más allá. Ya sea que sea un entusiasta de la comida, un vegetariano o un carnívoro duro, Alemania ahora ofrece un mundo de sabores para satisfacer a todo tipo de viajero.